Aquí os dejo algunas imágenes de la ruta nocturna que realizamos el pasado sábado ya por segundo año.
En esta ocasión hemos tenido más participantes de los esperados, no sabemos cuantos con exactitud, ya que llegó un momento en que Javi se puso en huelga de bolis caídos y dejó de apuntar a los numerosos ciclistas que asistieron. Seguramente el número estuvo próximo a los 100.
La ruta se desarrolló sin incidentes graves, pero con una cantidad de pinchazos digna de recogerse en el libro Guinness. Nuestros amigos abrojos hicieron de las suyas y nos dieron una noche movida en cuanto a cambios de cámaras.
En Valenzuela disfrutamos de un avituallamiento muy veraniego y refrescante a base de sandía, melón y gazpacho; y a la vuelta con todos los amigos echamos un buen rato charlando y dando buena cuenta del pisto, caldereta y demás manjares que nos prepararon nuestros cocineros de costumbre, unos fenómenos a los que agradecemos su sacrificio cada vez que tenemos una reunión.
No nos queda más que agradecer a todos los bikers su participación y esperar que el próximo año nos volvamos a ver, si puede ser con menos pinchazos.
Saludos
Ángel (el arquitecto)
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